La Talasoterapia es una de las técnicas con más propiedades beneficiosas para la salud. Su acción, basada en el aire, el agua y las algas, equilibra el organismo disminuyendo y previniendo numerosos problemas. Las algas marinas son portadoras de numerosas vitaminas, así como calcio, hierro, proteínas y minerales. Su aplicación sobre la piel hace que ésta absorba todas estas propiedades, lo que se traduce en numerosos beneficios a nivel general.
¿Para qué está indicada la Talasoterapia?
- Propiedades respiratorias: la brisa del mar, llena de microgotas procedentes del agua marina, mejora notablemente los problemas de asma y faringitis.
- Propiedades dermatológicas: está indicado para la psoriasis.
- Propiedades circulatorias: el agua realiza un masaje que favorece la circulación sanguínea, previniendo y reduciendo la pesadez en las piernas y las varices
- Propiedades locomotoras: mejora las molestias ocasionadas por la osteoporosis y reumatismos crónicos, y disminuye los edemas.
- Propiedades analgésicas: disminuye los dolores a nivel general.
- Propiedades psicológicas: el contexto de relax en el que se realiza este tratamiento está indicado para tratar problemas de depresión, estrés o insomnio.
- Propiedades estéticas: la riqueza del agua del mar y algas en minerales y oligoelementos, mejora notablemente y previene la aparición de celulitis, tonificando la piel y mejorando la circulación sanguínea, una de las principales causantes de su aparición.
A pesar de sus múltiples propiedades, la Talasoterapia, como el resto de las terapias también puede tener sus contraindicaciones dependiendo del estado de salud general del paciente, por lo que es recomendable que se consulte con el médico antes de iniciar un tratamiento.