De estilos bien distintos, los dos artistas fusionan su visión de la materia en la obra que da título a la muestra y que preside el vestíbulo del hotel. Se trata de una estructura metálica giratoria con la que Fierro logra ensalzar el valor artístico de una roca «especial» que Garrido encontró en un monte de Burgueira. «Es espectacular por la cantidad de minerales que tiene y por el brillo», explica.
Xabi Garrido, autor del monumento a los voluntarios del «Prestige» que se alza desde hace un año en la costa de A Guarda, esculpe desde hace años la piedra. La mayor parte de sus obras están inspiradas en el arte rupestre gallego y en ellas realiza una reinterpretación de los petroglifos hallados en el sur de la provincia de Pontevedra.
Por su parte, Carlos Fierro transforma el acero en diferentes volúmenes con caprichosas formas geométricas y también en obras de aspecto más figurativo tras las que se adivina un trasfondo de crítica social».